Saturday, March 17, 2007

UNA TARDE FRÌA...

A veces, uno se convierte en un cuento y la verdad, esa veracidad apabullante de la vida, con el contorno sùtil del borrador, nos difumina lentamente..." Decìa el acusado frente al cadalzo justo, cuando se abrìa a sus pies un fozo oscuro y sentìa la soga apretarle el cuello. "Amèn" dijo el cura..."Por fi..." dijo el pròscrito sin terminar la frase. Uno a uno, se fueròn Yendo los presente, dejando a dos alguaciles y a un cuerpo como badajo de camapana en ese cuarto gris. En la calle, alguien silbaba una canciòn, un perro cagaba la acera y la madre del asesino; soltaba una làgrima sin miedos. "Es la eternidad, Aurora, es la eternidad..." Le decìa a mi amante envuelto en sus brazos, cuando apague la televisiòn donde habiamos presecenciado el ahorcamiento de un asesino serial. "Sì, es la eternidad..." dijo somnolienta. "Pero prefiero lo efìmero, como este beso" y vistiendose, saliò. Ambos sabiamos que como el muerto ese, nada era para siempre; el olvido nos llego una tarde frìa de sexo._________________ JoelLangarikaPuertoVallartaJaliscoMèxicoCRDReservados5/2006